528. La verdadera compasión no suprime la vida,
sino que la cuida hasta el final, rodeándola de respeto, de cariño y de
oraciones.
529. El hombre es portador de derechos humanos, de
valores divinos y de destinos eternos.
530. La mayoría de las personas no piensan en su
alma, sino sólo en su cuerpo.
531. Nadie hay tan inútil que no sirva para algo.
532. Nuestra sociedad a llegado a tal grado de
monstruosidad que el claustro materno se ha convertido en el lugar más
peligroso para un niño.
533. El terrorismo degrada y envilece a sus
autores.
534. La vida tiene mucho de misterio, de
descubrimiento, de aventura, de riesgo, de drama, de tragedia, de derrota, de
victoria, de compromiso, de entrega. ¡Vívela, ámala, defiéndela apasionadamente!
Y no olvides que Jesús ha venido para que tengamos vida y la tengamos en
abundancia.
535. No hay apuesta más apasionante que apostar
por la vida.
536. La moral católica es la más exigente, y
también la más bella y la que más libera y dignifica al hombre.
537. El hombre es un misterio envuelto en carne
mortal.
538. Todo el evangelio esta revelándome lo que yo
soy.
539. Los derechos humanos tienen una raíz
cristiana.
540. Ya es hora de reconstruir una cultura de
respeto a la vida desde el momento cero de su concepción hasta su extinción
natural.
541. Hay una profunda tristeza y un amargo
remordimiento en el corazón de las madres que destruyen la vida del niño no
nacido.
542. No valores a los hombres por su estatura, ni
por su fuerza física, ni siquiera por su inteligencia. Valóralos por su
corazón, aunque hayan tenido tres infartos.
543. Un solo embrión humano vale más que todos los
museos y bibliotecas del mundo.
544. Los derechos humanos, que en último término
se fundan en Dios, son inalienables y trascienden todo ordenamiento
constitucional y jurídico.
545. Los que defienden el aborto son
inconsecuentes cuando se quejan del terrorismo. Si ellos tienen razones para
matar, los otros también.
546. Un pueblo que mata a sus hijos, por muy
tecnificado que esté, tiene un futuro muy sombrío.
547. Debemos recuperar la capacidad de asombro
ante las maravillas de la Creación, ante esa “supermaravilla” que es el ser humano,
ante el misterio y la grandeza de Dios.
548. El aborto provocado es una de las mayores
aberraciones morales y una perversión criminal de la medicina.
549. El que está a favor del aborto no tiene
derecho a condenar a los terroristas. Tanto éstos como él, aplican el mismo
principio: que el fin justifica los medios.
550. El aborto es el mayor genocidio de nuestro
tiempo.
551. La Creación es una magnífica biblioteca: la
montaña es un libro, el desierto es un libro, el firmamento es un libro, cada hombre
es un libro, aunque esté encuadernado en rústica.
552. Dios nos libre de los racismos al derecho y
de los racismos al revés.
553. Podemos y debemos ser tolerantes con muchas
formas de pensar y de actuar. Pero no podemos ser tolerantes con el atropello
de los derechos humanos.
554. Aun el mayor delincuente tiene valores
positivos.
555. Pongámonos incondicionalmente a favor de la
vida. Defendámosla desde el kilómetro cero desde su concepción hasta su
extinción natural. Opongamos valientemente esta cultura de vida a esa cultura
de muerte, que es el aborto, la eutanasia y el terrorismo.
556. Cinco años después de haber abortado, una
mujer decía con tristeza: “Un niño pesa más en la conciencia que en los
brazos”.
557. Si no vemos al hombre como imagen de Dios,
los derechos humanos carecen de base.
558. La defensa de la vida no nacida beneficia a
toda la humanidad.
559. Dios es el fundamento último de la dignidad
del hombre, creada a su imagen y semejanza.
560. ¿Sientes ternura hacia los ancianos? Tienes
un gran corazón. ¿Sientes desprecio hacia ellos? Que Dios te encuentre confesado.
561. Hay personas de gran valor, pero que tienen
rota su cordura. Me recuerdan a ciertos relojes de oro, siempre parados, porque
tienen rota la cuerda, pero que, a pesar de todo, tienen razón dos veces al
día.
562. Los derechos de la persona humana comienzan
en el momento de su concepción.
563. El aborto es un rio de sangre inocente, una
hecatombe silenciosa que clama al cielo.
564. Sobra técnica. Falta humanismo.
565. Dios fue el primero que pensó en los derechos
humanos.
566. El ejercicio de la sexualidad es algo más que
un capricho necesario.
567. ¿Qué cultura es ésta, que promueve la
ecología y favorece el aborto? ¿No se da cuenta de que los desmanes contra la
naturaleza tienen su raíz en la falta de respeto a la vida?.
568. Nuestra cultura no tiene alma, es una cultura
de muerte, porque pone la técnica y el dinero por encima del hombre.
569. Hay que proteger a las especies. Pero, sobre
todo, hay que proteger a la especie humana.
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