sábado, 8 de marzo de 2014

PAZ




1227.  La paz con Dios es la base de la paz entre los hombres.


1228.  La paz se asienta sobre estos cuatro pilares: la verdad, la libertad, la justicia y el amor.


1229.  Si vives la armonía en ti mismo, la descubrirás también en los demás.


1230.  El perdón es una maravillosa fuente de paz.


1231.  La incapacidad de los hombres para construir hoy la paz tiene como causa su obstinada negación de Dios. Mientras los hombres no cumplamos todos los mandamientos de la Ley de Dios, no habrá paz en la tierra.


1232.  Con la paz de tejas para abajo, los tejados se derrumban muy pronto.  


1233.  Si no tienes paz en tu corazón, ¿cómo podrás sembrarla y construirla fuera de ti?


1234.  Valen la pena todos los esfuerzos y sacrificios para conseguir la paz.


1235.  La paz no es solamente orden y armonía. Es mucho más. Es el amor tomado en serio.


1236.  La paz, la justicia y la libertad son frutos del verdadero amor


1237.  Perdemos la paz siempre que queremos demasiado de algo o de alguien.


1238.  La paz puede perderse lo mismo en el claustro que en el mundo. Porque, donde realmente se pierde, es en el propio corazón.


1239.  Es en nuestro corazón donde nace o muere la paz.


1240.  La paz solo será posible en una sociedad cultivadora de virtudes.


1241.  El secreto de la verdadera paz está en el respeto a todos los derechos humanos.


1242.  El portal de Belén debe ser el punto de anclaje de toda sociedad que quiera convivir en paz.


1243.  El reconocimiento y el respeto de todos los derechos humanos es condición indispensable para la verdadera paz.


1244.  La conciencia de llevar una vida recta según Dios produce una paz y una alegría incomparables.



1245.  Preguntaron a uno: ¿Cuál es el secreto de tu buen dormir? Muy sencillo: hasta las doce de la noche pienso yo; a partir de esa hora Dios piensa por mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario